Los delitos de drogas pueden llevar a la detención y la expulsión

Un cargo de drogas en Carolina del Norte tiene el potencial de llevar a serias penalidades para cualquiera. Sin embargo, si usted recibe un cargo de este tipo y no es un ciudadano legal de los EE.UU., las repercusiones a las que se enfrenta pueden ser aún más graves. Cualquier delito de drogas puede conducir a la detencion y deportacion si usted no es un ciudadano de los EE.UU., incluso si el delito parece menor en comparacion con otros delitos de drogas.

Según la Drug Policy Alliance, si se le expulsa de los Estados Unidos tras un delito de drogasEs posible que no pueda volver a entrar en el país nunca. Esto puede resultar problemático independientemente de las circunstancias. Sin embargo, si ya no tienes perspectivas de empleo ni lazos familiares o de otro tipo en tu país de origen, tener que volver allí puede resultar especialmente devastador.

Datos y cifras de las expulsiones relacionadas con las drogas

Las deportaciones relacionadas con drogas son bastante comunes en Carolina del Norte y en todo Estados Unidos. Entre 2007 y 2012, el número de personas deportadas por motivos relacionados con las drogas aumentó un 43%. Durante ese periodo, más de 250.000 no ciudadanos fueron deportados por infracciones relacionadas con las drogas.

A menudo, los deportados por delitos de drogas llevaban encima pequeñas cantidades de marihuana. Sin embargo, incluso simple posesión pueden conducir a la deportación. En 2013, la posesión de marihuana fue el cuarto motivo más común, relacionado con las drogas o de otro tipo, por el que los no ciudadanos fueron deportados.

Tendencias de deportación

Los estudios sugieren que las minorías tienen más probabilidades de ser deportadas tras una detención por drogas. Los negros y los latinos, en particular, se enfrentan a un alto riesgo de deportación.

La aplicación desproporcionada de la ley de drogas sigue afectando a muchas comunidades. Algunos defensores creen que despenalizar la posesión de drogas es un paso para reducir el número desproporcionado de minorías detenidas y deportadas por delitos de drogas.